Además de sufrir el dolor por la repentina partida de su padre, los tres niños afrontan un futuro incierto puesto que era el único familiar que tenían.
El homicidio del que fue víctima Jhonatan José Luis Castro Ruiz, el venezolano muerto a tiros la tarde del sábado 20 de julio en el barrio Vista Hermosa, sector La Paz, deja desamparados a sus tres hijos menores de edad, quienes no contaban con más familiares en Colombia.
Castro Ruiz fue ultimado en momentos que se trasteaba de un apartamento en dicho sector. Apenas estaba sacando sus pertenencias de la casa cuando fue sorprendido por los asesinos y no alcanzó a subir sus enseres al camión que lo llevaría al que iba a ser su próximo lugar de residencia.
Según trascendió, la víctima estaba acompañada de varias personas que lo ayudaban con la mudanza, quienes manifestaron sentirse tristemente sorprendidas, puesto que, tal como lo afirmaron, se trataba de un hombre dedicado a la crianza de sus hijos y a ganarse el sustento diario como vendedor ambulante de productos varios.
El crimen deja profundamente consternados a quienes conocían a Jhonatan Castro y por las implicaciones que su muerte violenta deja en sus hijos, quienes claman por ayuda para poder sepultarlo, dadas las precarias condiciones económicas en medio de las cuales sobreviven.
En la investigación de los hechos, las autoridades analizan que al parecer Castro Ruiz había denunciado amenazas en su contra y que sería el motivo por el cual habría decidido cambiar de lugar de residencia.