El proyecto de ley tuvo 38 votos afirmativos, 29 negativos y una abstención.
Este miércoles, el Senado de Argentina convirtió en ley un proyecto para legalizar el aborto tras un largo y fervoroso debate, lo que disparó el festejo de la inmensa multitud que apoyaba la iniciativa.
Miles de mujeres y activistas del feminismo estallaron en una celebración en las afueras del Congreso, en el centro de Buenos Aires, cuando la ley fue aprobada en la madrugada por 38 votos a favor, 29 en contra y 1 abstención, señala el portal Infobae.
La ley busca evitar la muerte por mala práctica de mujeres que realizan abortos de forma clandestina, mediante la interrupción legal y gratuita de los embarazos hasta las 14 semanas de gestación.
Según el citado medio argentino, el proyecto fue impulsado por el presidente de centroizquierda, Alberto Fernández y dividió las opiniones en la sociedad argentina y también en el Congreso, donde recibió el apoyo de legisladores oficialistas y opositores.
Semanas atrás, la norma había sido aprobada por la Cámara de Diputados pese a la oposición de la Iglesia Católica local; hasta el Papa Francisco -de nacionalidad argentina- criticó el martes la iniciativa a través de un trino: “Toda persona descartada es un hijo de Dios”.
La actual normativa argentina solo permite la interrupción voluntaria del embarazo cuando hay un riesgo grave para la madre o en caso de violación, pero los impulsores de la despenalización del aborto destacan que ni siquiera en estos casos las mujeres -especialmente las pobres- reciben una atención adecuada.
Junto con el proyecto para despenalizar el aborto, los senadores aprobaron una norma paralela para asistir a las mujeres que desean seguir adelante con su embarazo y enfrentan severas dificultades económicas o sociales.