Tal como lo establece el calendario de elecciones 2022, desde ya los candidatos al Congreso pueden empezar la propaganda política. La Procuraduría motivó a los alcaldes a que eviten el exceso de material partidista en las calles.
Según lo normado en la Ley 1475 de 2011, la cual reglamenta los elementos básicos de la propaganda política, en especial el margen de tiempo en el que se puede hacer uso del espacio público y de los medios de comunicación, y el mismo calendario electoral, los candidatos al Congreso ya pueden iniciar sus campañas proselitistas con miras al 13 de marzo de 2022.
No obstante, estas jordanas de publicidad se han resumido en contaminación visual y auditiva en zonas urbanas y rurales. En Santa Marta los ambientalistas llaman a la conciencia a los candidatos para que respeten la estética de la ciudad y además cumplan con las bases legales.
“Es muy triste que en estos tiempos aún encontremos postes y paredes con restos de diferentes campañas de hace muchísimos años. Ahora las cosas han cambiado, porque pueden utilizar la tecnología para llegar masivamente a sus posibles electores y no utilizar las calles de la ciudad y afearlas. Si pierden ahí dejan las propagandas y si ganan también lo hacen”, dijo William Gallo, líder ambiental.
Gallo dice además que le preocupa el material que utilizan para la impresión de afiches y vallas, pues, varios de ellos tardan años en degradarse, y terminan en los ríos, afectando los ecosistemas.
Y ante esta situación generalizada, por competencia es el Departamento Administrativo de Sostenibilidad Ambiental (Dadsa) a quien en esta capital le corresponde velar para que la norma sobre la propaganda en espacios públicos sea respetada y se cumpla a cabalidad. Es propio de su naturaleza desmontar anuncios que estén fuera del canon de lo permitido.
“Debe estar reglamentado por el Dadsa la cantidad de vallas que pueden instalar en la ciudad, y que de ningún modo se puede entender como el permiso para ensuciar paredes.
Recuerdo que antes se empapelaba el puente de la araña y todo el centro, y si alguien lo llega hacer hoy esta autoridad ambiental está en la obligación de limpiar el sector y pasarle la cuenta a la campaña infractora para que pague por haber contaminado, o su defecto sancionarlos de acuerdo con el procedimiento y requerir al Consejo Nacional Electoral para que proceda a las investigaciones”, dijo el abogado Humberto Díaz Costa, especialista en derecho electoral.
El jurista insistió que la contaminación auditiva también es sancionable dado que en ocasiones los carros con altos parlantes y a altos decibeles acaban con la tranquilidad de las comunidades.
“Según las reglamentaciones internas en cada municipio para el tema ambiental, los ciudadanos que quieran denunciar la contaminación auditiva y visual deben dirigirse a las Secretarías de Gobierno o las dependencias creadas para este menester”, agregó Díaz Costa.
El abogado recordó que según las normas los candidatos a corporación no reciben permiso de manera individual para la propaganda política, dado que, quien recibe la autorización es la colectividad que lo avala y es a quien le asignan el número de vallas y cuñas radiales que deben ser repartidos entre quienes conforman la lista.
