Con más de 40 años al servicio de la Policía Nacional llegó en febrero de 1968 a Santa Marta, específicamente en la Quinta de San Pedro Alejandrino.
Amable, jovial, buen amigo y un caballero; así será recordado el Dragoneante Luis Eduardo Pinto Fuentes, considerado como uno de los historiadores que más conocía sobre El Libertador Simón Bolívar, el cual falleció en la mañana de este jueves.
Su memoria prodigiosa hizo posible crear alrededor del Dragoneante Pinto un imaginario especial, que no solo cautivaba, sino que permitía a sus compañeros y turistas llegar a la fascinación, por su entonación, elocuencia y la forma como detalle a detalle hablaba del gran héroe nacional.
Con su lamentable fallecimiento, la tristeza y el pesar embarga a historiadores, familiares, y amigos; sentimientos a los que también se unen los funcionarios del Monumento nacional, quien junto a su directora Licenciada Zarita Abelló de Bonilla recuerdan todo lo que aportó, no solo como miembro de la Policía Nacional, adscrito a este lugar histórico, sino como su guía insigne.
Fascinada con su capacidad de expresión, así lo recuerda con nostalgia la Licenciada Zarita Abelló, quien afirma “me asombraba su pasión por leer, su dedicación a estudiar la vida de Bolívar, sus batallas y personajes que lo rodearon. Él era una enciclopedia ambulante, el Dragoneante tenía la biblioteca más completa sobre El Libertador”.
Con más de 40 años al servicio de la Policía Nacional llegó en febrero de 1968 a Santa Marta y a la Quinta de San Pedro Alejandrino como Comandante de la Estación, que en ese entonces funcionaba en el Monumento, desde entonces y durante 36 años fue el guía insigne del lugar.
Era Bogotano de nacimiento, samario de corazón, pero ante todo un hombre, un gran historiador. Para quienes tuvieron la oportunidad de compartir con él les dejó una gran enseñanza como generación que no hay límites para aprender, pero ante todo a amar la historia y valorar esos personajes que hacen posible su realidad.
Reconocimientos
Muchos fueron los reconocimientos del Dragoneante Pinto la Gran Cruz de Bastidas; la medalla de servicios por 15, 20, 25, 30 y 35 años en la Policía Nacional; la de servicios distinguidos en categoría especial; la medalla del servicio distinguido del Ejército de Venezuela.
La réplica de la espada del Libertador otorgada por el presidente de Venezuela, Hugo Chávez.
La Gran Cruz al mérito policial refrendada por el presidente Andrés Pastrana, entre otras condecoraciones y reconocimientos como el hacer parte de la Academia de Historia de la Policía, de la Sociedad Bolivariana del Magdalena, y fue distinguido Doctor Honoris Causa en Ciencias Sociales, por parte de la Universidad Simón Bolívar de Barranquilla.